Castilla y León

Platos

  • Cochinillo asado: Especialmente famoso en Segovia, es un lechón asado al horno hasta que la piel queda crujiente.

Curiosidad: En Segovia existe una tradición de cortar el cochinillo con el borde de un plato de porcelana, demostrando así su ternura extrema.

  • Lechazo: Cordero lechal asado, muy popular en toda la región, especialmente en Palencia.

Curiosidad: Los pastores de Castilla y León desarrollaron un silbido especial llamado "chiflo" para comunicarse con sus rebaños a largas distancias.

  • Sopa de ajo o sopa castellana: Sopa a base de agua o caldo, pan, laurel, ajo, pimentón y aceite de oliva, a la que finalmente se le añade un huevo escalfado que le confiere una mayor suavidad, textura más cremosa, un toque de sabor y un añadido nutritivo extra. Plato muy reconfortante que se consume durante los meses fríos y es típico de toda la región.

Curiosidad: Durante la Guerra Civil española, esta sopa se conocía como "sopa de la victoria" debido a su capacidad para alimentar a muchas personas con pocos ingredientes.

  • Hornazo: Empanada rellena de embutidos y huevo, tradicional de Salamanca.

Curiosidad: Originalmente, este plato se preparaba para celebrar el final de la Cuaresma, simbolizando el fin del ayuno con una explosión de sabores.

  • Cocido maragato: Contundente cocido de garbanzos originario de la comarca de La Maragatería. Tiene una peculiaridad que le ha dado una popularidad fuera de la región, se come al revés. Primero la carne, luego los garbanzos y, por último, la sopa. ¿Por qué? Esta tradición se ha mantenido desde la época en la que los romanos estaban asentados en la zona: primero ingerían el alimento que más calorías aportaba (la carne) por si tenían que salir a la batalla a mitad del almuerzo y abandonarlo, en ese caso, era mejor dejar la sopa que era la parte que menos energía les aportaba.

Curiosidad: Los arrieros maragatos, que transportaban mercancías por toda España, popularizaron este plato y su peculiar forma de comerlo en sus largas travesías.

  • Arroz a la zamorana: Plato de arroz con diversos tipos de carne, típico de Zamora.

Curiosidad: Este plato surgió como una adaptación local del paella valenciana, utilizando ingredientes típicos de la región castellana.

  • Chuletón de Ávila: Corte grueso de carne de vaca, muy apreciado en la región.

Curiosidad: La raza de vaca Avileña-Negra Ibérica, de la que procede este chuletón, está protegida y solo se cría en determinadas zonas de España.

  • Bacalao al ajo arriero: Plato de bacalao típico de varias provincias de la región.

Curiosidad: Este plato tiene sus orígenes en las recetas de los arrieros que transportaban el bacalao salado desde los puertos hasta el interior de la península.

  • Quesos: Como el Queso Zamorano o el Queso de Valdeón.

Curiosidad: El queso de Valdeón se madura tradicionalmente en cuevas naturales del Valle de Valdeón, lo que le confiere su característico sabor intenso.

  • Ancas de rana a la bañezana: Un plato típico de La Bañeza que consiste en las patas traseras de rana, cocinadas con tomate, cebolla y especias.

Curiosidad: Este plato surgió como una alternativa económica a la carne durante tiempos de escasez, convirtiéndose luego en una delicatessen local.

  • Castilla y León es conocida por su rica variedad de embutidos, que son una parte esencial de su gastronomía. Algunos de los embutidos más típicos de la región incluyen: 
    • Morcilla ​​de León:  Este embutido se elabora con sangre de cerdo, cebolla y especias. Exquisita frita y untada en una tostada de pan, o bien añadida a un buen guiso. Muy apreciada por su sabor y un clásico de la provincia.

Curiosidad: En algunas zonas de León, existe la tradición de colgar las morcillas en las chimeneas para que se ahúmen naturalmente, lo que les confiere un sabor único.

    • Morcilla de Burgos: A diferencia de la de León, esta añade un ingrediente distintivo: arroz. Tiene un sabor más suave y versátil, pudiendo consumirse tanto cruda como frita o en guisos.

Curiosidad: Durante la Edad Media, los monjes de los monasterios burgaleses perfeccionaron la receta de la morcilla, añadiendo arroz para hacerla más nutritiva durante los periodos de ayuno.

    • Chorizo ​​de León: Es un embutido característico de esta provincia que ha obtenido la Marca de Garantía "Chorizo ​​de León", certificando su calidad y autenticidad.
      Se elabora con carne de cerdo fresca y triturada, preferentemente panceta, paleta y tocino. Se añaden especias (sal, ajo picado y pimentón dulce o picante), se mezcla, luego se embute en tripas naturales de cerdo formando una "corra", "herradura". Por último se cuelga para curar al aire durante un mínimo de 30 días, aprovechando el clima frío de la región y durante este proceso, se ahúma con leña de roble o encina, lo que le confiere su característico sabor ahumado.
      Se sirve en lonchas como aperitivo (de "tapa"), es común en los cocidos y también se cocina a la plancha o a la brasa.
      Este embutido no solo es un alimento básico en la dieta leonesa y muy apreciado, sino que también forma parte de la cultura gastronómica de la región.

Curiosidad: En la localidad de Valdevimbre, se celebra anualmente la "Feria del Chorizo", donde se elabora el chorizo más largo del mundo, superando los 100 metros de longitud.

    • Botillo del Bierzo: Es embutido semicurado que posee la Indicación Geográfica Protegida. Se hace con costillas y rabo de cerdo, sazonado con especias y embutido en intestinos. Se consume cocido y suele servirse acompañado de patatas cocidas (o cachelos) y berza. Posteriormente se ahúma. Es un plato contundente, ideal para los meses fríos.

Curiosidad: Antiguamente, el botillo se consideraba "comida de pobres" por utilizar partes menos nobles del cerdo, pero hoy en día es un manjar codiciado incluso en restaurantes de alta cocina.

    • Cecina de León: Se trata de carne de cruda de vaca, salada, ahumada y curada con humo de leña de roble o encina (lo que le otorga un sabor distintivo), proceso que dura un mínimo de siete meses. Cuenta con la Indicación Geográfica Protegida y es un manjar apreciado tanto en la región como fuera de ella.

Curiosidad: Durante la Reconquista, los soldados cristianos llevaban cecina en sus alforjas por su alto valor nutritivo y larga conservación, convirtiéndola en un alimento estratégico.

    • Torreznos de Soria: Panceta de cerdo adobada con sal y pimentón y frita, que se caracteriza por su corteza crujiente y su interior tierno. Muy sabrosos.

Curiosidad: En el pueblo soriano de Burgo de Osma, se celebra anualmente el "Concurso Nacional de Torreznos", donde se premia al torrezno más crujiente y sabroso de España.

Postres y dulces

  • Ronchitos de León: Caramelos elaborados con azúcar, cacahuete y cacao, que se popularizaron en el siglo XX. Son un dulce característico de la provincia.

Curiosidad: El nombre "Ronchito" deriva del verbo leonés "ronchar", que significa masticar o deshacer con los dientes, perfectamente descriptivo de la experiencia de comer estos caramelos.

  • Rosquillas de San Froilán: Dulces típicos que se consumen especialmente durante la fiesta de San Froilán. Fueron creados en los años 80 por un maestro confitero y se han vuelto muy populares.

Curiosidad: Durante las fiestas de San Froilán en León, existe la tradición de que los novios regalen a sus parejas una caja de estas rosquillas como muestra de afecto.

  • Hojaldre de Burgos: Dulce elaborado tradicional con capas de masa y mantequilla, que se caracteriza por su textura crujiente y ligera. Se obtiene mediante un proceso de laminado, creando múltiples capas que pueden ser rellenas de crema pastelera, chocolate o frutas. Es muy apreciado en la repostería local y se encuentra en diversas formas, como pasteles y galletas, siendo un símbolo de la gastronomía burgalesa.

Curiosidad: La leyenda cuenta que un aprendiz de pastelero inventó accidentalmente el hojaldre al olvidar incorporar la mantequilla a la masa y decidió añadirla en capas, creando así su textura característica.

  • Yemas de la Bañeza: Este postre se elabora principalmente con yemas de huevo, azúcar y almendra, creando una textura suave y un sabor delicado, exquisitas, artesanas y muy valoradas.

Curiosidad: Originalmente, estas yemas se crearon como forma de aprovechar las yemas sobrantes en los conventos, donde las claras se usaban para almidonar las vestimentas religiosas.

  • Imperiales de La Bañeza: La confitería Imperiales Alonso (La Bañeza) fue fundada en 1887 por Emilio Alonso Ferrero, quien comenzó a elaborar estos bizcochos de almendra. Se elaboran artesanalmente, sin aditivos ni conservantes, 100% naturales, lo que resalta su calidad. Además son aptos para celíacos ya que no llevan harina.

Curiosidad: Estos dulces ha recibido numerosos premios, incluida una Medalla de Oro en la Exposición Universal de París de 1900, compitiendo contra pastelerías de renombre mundial.

  • Mantecadas de Astorga: Este dulce es conocido a nivel nacional y tiene Denominación de Origen Protegida. Se suelen consumir como desayuno o merienda.

Curiosidad: Se dice que su origen se remonta al siglo XIX, cuando una monja del convento de Sancti Spiritus decidió compartir la receta secreta con una panadera local.

  • Hojaldres de Astorga: También conocidos como "mielitos", son pequeños pasteles de hojaldre bañados en miel. Su receta se popularizó en la década de 1960.
  • Merles de Astorga: Aunque no son tan conocidos como otros dulces de la región, tienen un sabor característico que los hace muy exclusivos y apreciados. Se trata de una base ovalada de masa de hojaldre que se rellena con una mezcla de huevos, margarina y azúcar. Esta combinación les da una textura suave y un sabor dulce y muy peculiar.
  • Nicanores de Boñar : Hojaldres que llevan el nombre del pastelero Nicanor Rodríguez, creados en 1880. Son conocidos por su textura y sabor único.

Curiosidad: Su creador, Nicanor Rodríguez, guardó celosamente la receta original hasta su muerte, momento en el que la legó a su familia para que continuaran con la tradición.

  • Galletas de hierro: También conocidas como galletas de ferro. Se trata de unas crujientes y sabrosas galletas con un relieve cuadriculado,  de sabor muy suave y elaboradas artesanalmente con harina de trigo, azúcar, mantequilla, huevos, esencia de vainilla y opcionalmente canela. Son un dulce típico de Sahagún, León. 

Curiosidad: Estas galletas se elaboraban originalmente utilizando moldes de hierro calentados al fuego, de ahí su nombre y su característico diseño cuadriculado.

  • Amarguillos de Sahagún: Galletas pequeñas elaboradas principalmente con almendras, que tienen un sabor distintivo. Propias de Sahagún, en la provincia de León.

Curiosidad: Estos dulces tienen su origen en los conventos de la zona, donde las monjas los elaboraban utilizando las almendras amargas sobrantes de la producción de licores, dándoles su característico sabor.

  • Lazos de San Guillermo: Un dulce tradicional elaborado en Cistierna, conocido por su masa hojaldrada y su combinación de mantequilla y almendras.

Curiosidad: La leyenda cuenta que estos dulces fueron creados por un pastelero local en honor a San Guillermo, patrón de Cistierna, imitando la forma de los lazos de su hábito monacal.

  • Rebojo Zamorano: Pan dulce, suave y esponjoso, similar al bizcocho que suele hornearse en moldes ovalados. 

Curiosidad: Originalmente, los rebojos se elaboraban sin levadura y se cocían en la lumbre la noche anterior a que salieran los pastores, quienes los llevaban en sus zurrones como alimento durante varios días en el campo. Esta práctica ancestral dio origen a su nombre, que proviene del verbo "rebojar", que significa envolver o enrollar, haciendo referencia a cómo se guardaban en los zurrones.

  • Yemas de Santa Teresa: Son un símbolo gastronómico de Ávila, su dulce más representativo. Poseen una forma redonda y están elaboradas principalmente con yemas de huevo, azúcar y, en ocasiones, un toque de limón. Un souvenir popular para los visitantes.

Curiosidad: Se dice que Santa Teresa de Jesús las inventó para alimentar a las monjas enfermas durante sus viajes de fundación de conventos.

  • Bollo Maimón: Es un bizcocho esponjoso con un agujero en el centro, a menudo decorado para ocasiones especiales. Se suele consumir acompañado de chocolate caliente y es propio de la provincia de Salamanca.

Curiosidad: Tradicionalmente, este bizcocho se preparaba para las bodas y se colocaba en el centro de la mesa nupcial, simbolizando la unión de las familias.

  • Perronillas: Galletas crujientes que se elaboran con harina, azúcar y huevo. Tienen un sabor característico y son muy populares en la región de Salamanca.

Curiosidad: Su nombre proviene de "perra gorda", una antigua moneda española, ya que originalmente estas galletas se vendían por el precio de una de estas monedas.

  • Flores de Alba: Galletas finas y crujientes en forma de flor, hechas con harina, azúcar, huevos y anís y son un clásico en la repostería salmantina.

Curiosidad: Estas delicadas galletas se elaboraban originalmente utilizando moldes de hierro calentados al fuego, una técnica que requería gran habilidad y precisión.

  • Socorritos o lazos de vidrio: Hojaldres artesanos con forma de pajarita y cubiertos con azúcar glas. Propios de la provincia de Palencia y que podemos encontrar en las pastelerías locales.

Curiosidad: Su nombre "lazos de vidrio" se debe a su apariencia brillante y frágil, que recuerda al cristal cuando se rompe.

  • Valadar: Tartaleta azucarada rellena de crema de almendra, compota de manzana y un crujiente de frutos secos. Se vende en cajas circulares que muestran elementos simbólicos, historia y paisajes de Valladolid, de donde es propio este dulce.

Curiosidad: Este postre fue creado en 2009 como parte de un concurso para desarrollar un dulce emblemático de Valladolid, convirtiéndose rápidamente en un símbolo gastronómico de la ciudad.

  • Tarta Costrada: Dulce típico de Soria. Se trata de un milhojas elaborada con capas de crema y/o nata, cubiertas con azúcar glas y almendra espolvoreada. Considerada uno de los postres más representativos de la gastronomía soriana, es muy apreciada tanto por locales como por visitantes.

Curiosidad: Según la tradición local, esta tarta fue creada accidentalmente cuando un pastelero soriano dejó caer una bandeja de milhojas, aplastándola y creando así su característica forma plana.

  • Ponche Segoviano: Pastel rectangular muy apreciado en Segovia, que consiste en capas de bizcocho empapadas en almíbar, intercaladas con crema de yema y cubiertas con una fina capa de mazapán. Se adorna con azúcar glas, sobre la que se marca un patrón de rombos utilizando un hierro caliente, lo que le da su aspecto distintivo.

Curiosidad: Este postre fue creado accidentalmente en 1926 cuando un pastelero local intentaba replicar un postre francés y, al no conseguirlo, creó esta delicia única.

Bebidas

  • Vinos: Castilla y León es una de las regiones vitivinícolas más importantes de España, con varias denominaciones de origen que destacan por la calidad de sus vinos. Las más relevantes: 

   - DO Ribera del Duero:
Conocida por sus potentes vinos tintos, elaborados principalmente con la variedad Tempranillo en las provincias de Burgos, Segovia, Soria y Valladolid.

Curiosidad: En esta región, algunas bodegas utilizan el método de "viticultura extrema", cultivando viñedos a más de 1.000 metros de altitud, lo que produce uvas con una concentración de sabores única debido al estrés climático.
   - DO Toro:
Famosa por sus vinos tintos robustos, intensos y con gran capacidad de envejecimiento. Propios de la zona de Zamora y Valladolid, son elaborados con uva "Tinta de Toro", una adaptación local de la Tempranillo.

Curiosidad: Los vinos de Toro fueron los primeros en viajar a América con Cristóbal Colón en 1492, debido a su alta graduación alcohólica que les permitía soportar largos viajes sin estropearse.
   - DO Rueda:
Abarca las provincias de Segovia, Ávila y Valladolid. Destaca por sus vinos blancos frescos y afrutados, elaborados principalmente con la uva Verdejo .
Esta denominación ha ganado popularidad tanto a nivel nacional como internacional.

Curiosidad: La uva Verdejo, característica de esta denominación, estuvo a punto de desaparecer en los años 70, pero fue salvada gracias a la intervención de la bodega Marqués de Riscal, que apostó por su potencial.
   - DO Bierzo:
Pertenece a la provincia de León, concretamente a la zona del Bierzo. Conocida por sus vinos tintos elaborados principalmente con la variedad Mencía (que ofrece un perfil aromático distintivo con notas de frutas rojas) y otras variedades como Godello.

Curiosidad: La variedad Mencía, típica del Bierzo, fue confundida durante mucho tiempo con el Cabernet Franc francés, hasta que los análisis genéticos demostraron que era una variedad autóctona única.
   - DO Cigales:
Reconocida por sus vinos rosados, que se elaboran principalmente con Tempranillo y Garnacha.
Estos vinos son frescos y afrutados, ideales para el verano y pertenecen a las provincias de Valladolid y Palencia.

Curiosidad: Tradicionalmente, los rosados de Cigales se elaboraban mezclando uvas tintas y blancas en el mismo viñedo, una práctica conocida como "campo mixto" que aún se mantiene en algunas bodegas.   - DO Tierras de León:
Perteneciente a la provincia de León, esta denominación incluye una variedad de vinos tanto tintos como blancos, la uva tinta principal es la Prieto Picudo, destacando en cuanto a blancas Godello y Albarín.

Además de las denominaciones de origen, Castilla y León cuenta con la IGP (Indicación Geográfica Protegida) "Vino de la Tierra de Castilla y León", que permite a los productores elaborar vinos utilizando diversas variedades de uva, tanto tintas como blancas.

Curiosidad: La uva Prieto Picudo, autóctona de esta zona, tiene la peculiaridad de que sus racimos crecen en forma de "pata de gallo", lo que facilita la aireación y previene enfermedades.

  • Orujo: Este licor fuerte es típico de León y se consume en diversas celebraciones. Se elabora a partir de la destilación de los restos de la uva y tiene un sabor intenso.

Curiosidad: En algunas zonas de León, existe la tradición de enterrar botellas de orujo durante un año para que "maduren" bajo tierra, lo que supuestamente mejora su sabor.

  • Limonada: Muy popular durante la Semana Santa, esta bebida se elabora con vino tinto, azúcar, higos secos, pasas, zumo de limón, naranjas, canela y cáscaras de frutas. Se consume fría, especialmente entre los cofrades después de las procesiones.

Curiosidad: Durante la Semana Santa en León, existe una competición no oficial entre las cofradías para ver quién elabora la mejor limonada, creando recetas secretas que se transmiten de generación en generación.

Denominaciones de Origen e Indicaciones Geográficas Protegidas:

 

  1. Arlanza (DO): Situada entre Burgos y Palencia, produce vinos robustos y complejos, con una excelente relación calidad-precio.
  2. Arribes (DO): Ubicada en el suroeste de Zamora y noroeste de Salamanca, sus vinos son frescos, ligeros y afrutados.
  3. Bierzo (DO): En el valle del río Sil, en León, se caracteriza por vinos con estructura y complejidad, aromas a frutos negros y especias.
  4. Cigales (DO): Principalmente en el municipio de Cigales, se producen vinos frescos con notas a frutas blancas y cítricas.
  5. Ribera del Duero (DO): La denominación más extensa de Castilla y León, famosa por sus potentes vinos tintos.
  6. Rueda (DO): Primera denominación reconocida en la comunidad, conocida por sus vinos blancos frescos y elegantes.
  7. Tierra de León (DO): Reconocida por su carácter tradicional y variedades autóctonas con notas a frutas negras.
  8. Tierra del Vino de Zamora (DO): Vinos con un carácter distintivo, elaborados principalmente con Tinta de Toro.
  9. Vino de la Tierra de Castilla y León (IGP): Sello que agrupa vinos producidos en la comunidad que no se acogen a una DO específica.
  10. Toro DO: Conocida por sus potentes vinos tintos de la variedad Tinta de Toro.

 

Ingredientes Locales Destacados:

 

  1. Uvas: Variedades como Tempranillo, Verdejo, Albillo, Mencía y Tinta de Toro son fundamentales para los vinos locales.
  2. Queso Zamorano: Queso elaborado con leche de oveja, conocido por su sabor intenso.
  3. Legumbres: Como la lenteja de Tierra de Campos, muy apreciada en la gastronomía local.
  4. Cereales: Trigo y cebada son cultivos comunes en la región.
  5. Carne de cordero: Especialmente el lechazo, valorado por su ternura y sabor.
  6. Embutidos: Como el chorizo ​​de Cantimpalos, típico de la región.
  7. Frutas: Manzana Reineta del Bierzo y pera conferencia son ejemplos destacados.
  8. Aceite de oliva: Producido en algunas zonas de la comunidad, aunque menos conocido que en otras regiones.
  9. Setas: La recolección de setas es una tradición muy arraigada en algunas zonas.
  10. Miel: Mieles artesanales producidas en diversas comarcas que reflejan la flora local.

Denominación de Origen (DO): Piensa en la DO como un sello de calidad que dice: "Este producto es especial porque viene de un lugar único". Es como si el terruño, el clima y las manos expertas de la gente local se unieron para crear algo extraordinario. Por ejemplo, cuando compras un vino con DO Rioja, sabes que estás probando la esencia de esa región en cada sorbo.


Denominación de Origen Protegida (DOP): La DOP es como la versión "superhéroe" de la DO. No solo dice que el producto es especial por su origen, sino que además está protegido por la ley europea. Es como si tuviera un escudo que lo protege de imitaciones. Cuando ves un queso Idiazabal con DOP, sabes que ese queso ha nacido, creció y se ha elaborado en su tierra natal, siguiendo tradiciones centenarias.


Indicación Geográfica Protegida (IGP): La IGP es como el primo cercano de la DOP, pero un poco más relajado. Aquí, el producto tiene una conexión especial con su lugar de origen, pero no necesita que todo el proceso se haga allí. Es como si el producto tuviera un pasaporte de su tierra, pero pudiera viajar un poco. Por ejemplo, el Jamón de Teruel IGP: los cerdos pueden haber nacido en otra parte, pero el jamón se cura en Teruel, dándole ese sabor característico.


Lo curioso es que estas etiquetas no solo protegen la calidad del producto, sino que también cuentan una historia. Cada vez que disfrutas de uno de estos alimentos, estás saboreando siglos de tradición y el trabajo de generaciones de productores apasionados. Es como hacer un viaje gastronómico sin salir de tu cocina.